Stanley Kubrick nació en 1928 en un barrio del Bronx de Nueva York, en el seno de una familia de clase media-alta de origen judío.
Siendo joven demostró un interés genuino por la fotografía, la cual pudo practicar gracias a una cámara réflex que sus padres le obsequiaron. Sin embargo, no fue sólo la fotografía lo que lo llevó a ser uno de los mejores en el mundo del cine. La música y el ajedrez fueron piezas fundamentales en su carrera como director.
Desde sus inicios, Kubrick demostró tener la tenacidad y la visión para ser un agente de cambio para la creación cinematográfica. El veía el mundo con otros ojos, y buscaba con una voluntad férrea, lograr a toda costa todo aquello que se proponía, y no sólo eso, sino que además, se superaba así mismo.
Sus primeras filmaciones iniciaron en 1951 con documentales cortos de no más de 30 minutos, que le permitieron experimentar y aprender de forma casi autodidacta el mundo del cine. Day of the fight” (1951), “Flying Padre” (1951) y “The seafarers” (1953).
En 1953 realizó su primer largometraje llamado “Fear and Desire”, que a pesar de su escaso éxito le permitió financiar en 1955 la película, “El Beso del Asesino”, que aunque contó con pocos medios, la fotografía en blanco y negro, llamó la atención de James B. Harris, un productor de la NBC, con quien se asoció. Juntos rodaron en 1956, lo que hoy se conoce como la primera obra maestra de kubrick, “Atraco Perfecto”, la cual fue inspirada en la novela de Liones White, contando con un guión de Jim Thompson. La utilización del tiempo cinematográfico hecha por Kubrick supuso una innovación para la época, misma que le valió en la admiración de personalidades del medio como Kirk Douglas. Actor que firmó un contrato con ambos para la realización de cinco películas.
La primera, “Senderos de Gloria” (1957) narra la personal visión de Kubrick, sobre un episodio real de la Primera Guerra Mundial Constituye una crítica brutal a la lógica implacable de la jerarquía militar y al horror de la guerra. Sin duda alguna, kubrick demostró ser una persona que expresaba su visión.
Tras esta cinta, Kubrick trabajó junto a Marlon Brandon en “El Rostro Impenetrable”, aunque varios meses después sería despedido por problemas con el actor y este se haría cargo de la dirección. Fue de nuevo Douglas, quien buscaba un director para sustituir a Anthony Mann al frente de “Espartaco”, 1960, quién reflotó a Kubrick..La cinta ganó cuatro premios de la Academia, y fue un éxito comercial.
Lolita (1962), una de sus obras maestras más polémicas, que pudo realizar gracias a la autorización del escritor Vladimir Nabokov, donde él mismo se enfrasco en la aventura de adaptar el guión. Cuenta la historia de Humbert Humbert, un soltero de mediana edad que se enamora de Lolita, una adolescente de catorce años, que para conseguirla se casa con la madre de la menor.
En 1964, ya sin la compañía de Harri, estrenó una película tan polémica, que lo obligo a cambiar su residencia de manera definitiva a Inglaterra. Una película donde cuestionó el sistema de defensa estadounidense. “Dr. Strangelove“
La gloria, la fama mundial y un Oscar por la incursión de unos efectos especiales sin precedentes, fue lo que le otorgó la realización de la película “2001: Una Odisea del Espacio”. Una película en donde lo arriesgo todo, con la única finalidad de ser fiel a su visión y podernos narrar la futura evolución de la raza humana.
En 1971 estrenó “La Naranja Mecánica”. Una película de culto, que narra la historia de Alex, un joven violento cuyas únicas distracciones son la violación, la ultraviolencia y Beethoven.
Una característica de Kubrick, fue el gusto por experimentar con la fotografía y las bandas sonoras de sus películas. Siempre buscaba hacer algo diferente para poder lograr la perfección y el realismo. Nunca le gustó hacer las cosas de manera rutinaria. En cada película veía un mundo nuevo por descubrir.
De sus últimas películas, que nos dejó como legado de su trabajo están el “El Resplandor” y “Ojos Bien Cerrados”. Mismas que realizó en la década de los ochenta.
Pocas son las personas como Stanley Kubrick , que van por el camino creyendo en sí mismas y en lo que pueden lograr. Él hacia las cosas innovando, gritándole al mundo el interior de su alma a través del lente de una cámara. Su mundo nos los compartió sin importarle las críticas, y las consecuencias. Es por eso que hoy en día, es uno de los cineastas más influyentes del siglo XX.
