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Mieke Bal y Michelle Williams Gamaker traen su propuesta visual sobre la locura a la Nave Generadores del Centro de las Artes

 

Mieke Bal y Michelle Williams Gamaker

La locura vista a través del arte es siempre una oportunidad para la introspección, tal y como lo plantea la exposición Mieke Bal y Michelle Williams Gamaker / Cosas imposibles, que se abrirá el jueves 21 de junio en la Nave Generadores.

El videoarte predomina en esta exhibición, organizada por el Consejo para la Cultura y las Artes de Nuevo León a través del Centro de las Artes y que se abrirá a todo público en la planta alta de este espacio cultural y con entrada libre; la inauguración será a las 20:00 horas.

“El asunto principal de la exposición es la de crear una atmósfera positiva, interesante y atractiva en torno a la locura para que la gente sea capaz de aceptar y reconocer la locura en sí misma, en su mismo círculo de vida.

“Que la gente sepa que la locura es un hecho de la vida cotidiana, que es tan problemática, como divertida y hay una sabiduría en los locos, es una experiencia de inmersión sobre la locura que no tiene que ser extraña o peligrosa, sino algo que no hay que tener a distancia, sino cercano”, mencionó Mieke Bal, crítica y teórica cultural de origen holandés.

Esta muestra se podrá visitar hasta el 29 de julio.

Sobre las artistas

Mieke Bal (1946), es teórica cultural y crítica, ha sido Profesora dela Real Academia Holandesa  de las Artes y las Ciencias  (KNAW). Tiene su sede enla Escuela de Amsterdam para el Análisis dela Cultura (ASCA), dela Universidad de Amsterdam. Sus áreas de interés van desde la antigüedad bíblica y clásica al siglo XVII, el arte contemporáneo y la literatura moderna al feminismo y la cultura migratoria. Sus treinta libros incluyen  A Mieke Bal Reader (2006), Travelling Concepts in the Humanities (2002) and Narratology (3d edition 2009). Mieke Bal también es video artista, sus documentales experimentales en materia de migración incluyen Mil y un días, la colonia y la instalación Nada falta. Su trabajo se expone a nivel internacional y ocasionalmente trabaja como curadora independiente.

Michelle Williams Gamaker (1979) es  videoartista y escritora. Su trabajo varía desde retratos de un fotograma y videoinstalaciones hasta complejas reproducciones de la realidad a través de medios documentales y de ficción. El potencial de la narración sutil y sublime a través de lo cotidiano se encuentra en la raíz de su trabajo. Su trabajo en video fue reconocido por primera vez en el 2001 en el Bloomberg New Contemporaries y desde entonces se ha exhibido internacionalmente, sus documentales incluyen Elizabitch (2004), All About Évike (2005), Colony (2006) and Becoming Vera (2007).  Williams tiene sede en Amsterdam y Londres, donde terminó su doctorado en Artes Visuales en el Goldsmiths College. Es profesora de tiempo parcial enla Academia Gerrit Rietveld.

REPRODUCCIÓN DEL TEXTO DE SALA

Cosas imposibles

Ésta es una exposición sobre la locura —algo que todos conocemos, pero que conocemos poco. Consiste en instalaciones de video que abordan el concepto de locura y lo interpretan de una variedad de formas. Usted encontrará en ellas, en palabras de uno de los personajes, “cosas imposibles”. Se trata de un experimento de narrativa audiovisual en el que el medio del video, normalmente basado en la temporalidad, adquiere propiedades espaciales. Usted será el encargado de crear historias a través del trazo y ritmo de su recorrido, y de la manera en que se involucre en los retratos, relatos y escenas expuestas. Cosas imposibles combina aspectos de exposición y de instalación, y su significado no viene pre empacado, sino que es producido por cada visitante.

La “locura” que escenificamos asume varias formas, que pueden ser profundamente emotivas, francamente divertidas o inesperadamente reveladoras, pero tienen en común el participar de la naturaleza social de la locura. La violencia, y el asalto perverso que hace de individuos y sociedades, produce como un mecanismo de defensa la locura. El rechazo violento de la sociedad hacia aquellos que considera locos contribuye, a la vez, a fijar la relación entre locura y aislamiento. Nuestra locura reacciona ante esta compleja forma de ser (por un lado conocida y por el otro imposible de conocer) asumiendo varios rostros: la extravagancia teatral, el resurgir de traumas infligidos porla guerrao la herida permanente producida por antiguos abusos.

A medida que atraviese estos espacios se encontrará con nuevas formas de locura —algunas trágicas y otras ligeras; algunas evidentemente escenificadas y otras aparentemente genuinas. ¿Son imposibles estas cosas? Esa es la pregunta evidente, y conduce a otra que está implícita de la obra: ¿En verdad están locas estas personas, o lo fingen, o es mi propia cerrazón la que me impide considerarlas de otra forma? ¿Y qué dice de mí que piense así?

Mieke Bal y Michelle Williams Gamaker