Diario Cultura.mx

¿Cómo nace un libro?

El camino que recorre un libro, desde el nacimiento de la idea en el autor, hasta las manos de lector, puede ser largo y espinoso, sin embargo, los elementos involucrados en cada fase son de suma importancia.

“Producir un libro es un arte, ya que el manuscrito atraviesa por múltiples etapas”, comenta la editora Patricia Laborde, editora y escritora.

Creación de la obra.

Para la editora, existen dos tipos de escritores, los que trabajan bajo una estricta disciplina “con una mente estructurada y racional”, señala.

Y los que escriben bajo la inspiración, “apasionados garrapatean aquí y allá algunas ideas clave”, los define.

En cualquiera de los dos casos, el producto es un manuscrito.

En búsqueda del editor.

Cuando el manuscrito se encuentra listo, el autor comienza la búsqueda de un editor que crea y apueste por su obra.

“En ocasiones puede ser un proceso agotador y decepcionante”, señala Laborde. “El editor debe tener un olfato de sabueso para determinar si el documento tiene tanto valor literario, como valor comercial”.

En la mesa de edición.

El editor, lee, revisa y analiza la obra. Corrige fallas en el contexto, en la cronología, en los diálogos, revisa la congruencia de los personajes, etc.

“Además establece una relación con el autor para trabajar en conjunto”, agrega Patricia.

Diseñando la idea.

Del editor, el manuscrito pasa al diseñador, quien se encarga de la formación, digitalización, diseño de interiores y de portada. Con el fin de darle a la obra un impacto visual que complete el concepto del autor.

Sobre la plancha de imprenta

Una vez listo el diseño, se envía a la imprenta, donde se realiza el proceso de impresión, corte, compaginación, encuadernación, pegado o cosido y colocación de pastas o cubiertas.

El libro ve la luz

De aquí, el libro sale de las bodegas de la casa editora, ya sea a distribuidores o a librerías. Asimismo, se realizan una o varias presentaciones con el autor, en donde el libro se da a conocer a los medios.

En las manos del lector

Y finalmente, el libro llega a las manos del lector, quien lo adquiere con la esperanza de encontrar entre sus páginas algo que lo sorprenda. “De esta forma, se cierra el ciclo”, finaliza la editora.