Escritores de Nuevo León visitan a los internos del CERESO de Apodaca

La cultura como herramienta para la reinserción social está siendo una realidad gracias a los esfuerzos de la escritora y artista plástica Rossy Elizonda Dávila Guevara, quien desde 2001 coordina talleres de sensibilización artística a los internos, incluyendo modelado de barro, pintura y literatura.  El jueves 26 de Marzo de 2015 coordinó a varios escritores de nuestro estado para una lectura y diálogo en las instalaciones del Centro de Reinserción Social CERESO de Apodaca, N.L. Los escritores convocados fueron Adriana Cisneros Garza, Mariana García Luna, Rita BediaLizcano, Mónica Carrillo, Mayra Judith, Rossy Elizondo Dávila Guevara y su servidor Fernando Arturo Galaviz Yeverino, como parte de la “Semana Cultural”. Al final de la lectura y de la sesión de preguntas y respuestas, obsequiamos libros y firmas a los internos.

Libertad a través de la literatura

Todos sabemos lo tremendo y difícil de la situación del interno: no están todos los que son ni son todos los que están. La literatura no sólo les apoya a no sentirse presos y a disminuir su tensión por estar en esta situación. En este punto la literatura es una herramienta, un lúcido vehículo para cada interno revise su vida y pueda crear nuevos mundos e imaginarios desde su lugar, redescubriendo sus capacidades intelectuales y creativas, siendo la escritura y la lectura una “zona de libertad”, contribuyendo a salir “transformados”, ser “otro”. Como muchos casos que afortunadamente se han dado.

En este centro nos enteramos que un interno ganó un primer lugar nacional de literatura, en un certamen literario entre los diversos centros penitenciarios del país. Los internos además realizan obras de teatro, incluso la representación del Vía Crucis. Las expresiones artísticas de los internos logran muchas veces trascender los muros.

Una prisión es el reflejo de la sociedad, y lo bueno es que vimos las instalaciones limpias, sin rayones, unos internos con actitud afable, de mucha atención y respetuosa, muy sorprendente, que contrasta con las imágenes no tan gratas que se dice “afuera” y que lamentablemente hay arraigado prejuicios tanto en personas como en instituciones o empresas, que muchas veces niegan apoyos a los centros penitenciarios, olvidando que los internos son un importante grupo vulnerable que necesita apoyo.

Sólo estando ahí se puede apreciar de primera mano que la literatura puede ayudar al proceso de formación, al crecimiento personal, como actividad sensibilizadora en el rescate de los valores fundamentales de todo individuo.

“Hoy tuve una mañana loca, un mediodía de aprendizaje con los amigos internos del CERESO de Apodaca a quienes les dejamos un pedacito de corazón. A veces se nos olvida que aunque la gente comete errores, siguen siendo seres humanos… Un buen momento para replantear nuestra vida…” Mónica C arrillo.

“Con esto nos damos cuenta de lo que no se habla, muchas gracias por la invitación y la experiencia”. Rita BediaLizcano.