Kátharsis XXI es un intento para darles espacio a aquellos poetas que no cuentan con respaldo editorial. Sus fundadores, Juan Manuel Zermeño y Oziel González, están conscientes del difícil camino que significa ser independiente.
Para otorgarle perdurabilidad a la poesía, que muchas veces se pierde entre la ola de las redes sociales, optaron por la imprenta. Están conscientes que, si bien, estas redes dan difusión al texto, sólo duraría el tiempo que su escritor lo permitiera. Porque se puede cerrar la cuenta de Facebook o Twitter, pero un papel puede durar resguardado en una hemeroteca, o en la casa de alguna persona y ser recuperado.
El origen de Kátharsis XXI es tan simple como ambicioso. Surgió a partir de un proyecto escolar, una tarea de la facultad, que hizo cambiar la perspectiva de, al menos, uno de sus integrantes. Juan Manuel Zermeño pudo notar la importancia de una revista que en los años cincuenta había sido de gran relevancia en el medio, y cuyos líderes eran jóvenes, casi de la misma edad que ellos.
Su principal meta a conseguir, tras posicionarse entre el ámbito local, es fundar una editorial, donde la poesía joven sea su línea a seguir, donde puedan repetir las glorias del anterior grupo que albergó poemas de célebres poetas, como Octavio Paz. De hecho, entre bromas afirman que esperan ser comparados con él, que uno de sus legados sea ése. Así como que sea una radiografía, para el futuro, de lo que era la poesía regiomontana a principios del siglo XXI.
Kátharsis abre sus páginas a todo aquel que desee expresarse a través de las letras, no piden más que el poeta posea buena ortografía y que sea capaz de dale coherencia al texto. Sus planes los han llevado ya a la cuarta publicación de la revista. Y esperan más. Esperan que la gente los continúe recibiendo. Esperan dejar legado… recuerdos.