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Breves de Arte: Pintura Romántica

 

El Romanticismo en la pintura se extendió de 1770 a 1870, principalmente en Inglaterra y Alemania para cobrar fuerza posteriormente en Francia y España. En su origen, es una corriente literaria cuyas obras influyeron en los pintores y consiste en una forma de sensibilidad que glorifica al individuo, defendiendo la superioridad del sentimiento sobre la razón.

Los artistas plasmaban sus ideas y sentimientos personales encontrando en ocasiones inspiración en la literatura. Centraban su atención en el paisaje y la naturaleza, así como en la figura humana y la supremacía del orden natural por encima de la voluntad de la humanidad, viendo el destino bajo una luz más trágica o pesimista. La idea de que los seres humanos no estaban por encima de las fuerzas de la naturaleza los llevó a representar lo sublime, iglesias en ruinas, naufragios, masacres y locura. Desarrollaron temas históricos, en particular los de la Edad Media, ya que en ella veían una época de piedad intensa a la que se deseaba regresar, además, les atraía el exotismo, sobre todo las civilizaciones árabes, y también recurrían a temas folclóricos, costumbristas o populares.

La expresión se caracterizaba por fuertes contrastes de luz y sombra, prevalencia del color sobre el dibujo, una pincelada visible e impetuosa, empaste grumoso y espeso. Se procuraba una figura realista, aunque por influencia de la literatura alemana pronto aparecieron en los lienzos monstruos, brujas y espectros, formando parte de una temática fantástica y macabra que expresaba el misterio, la melancolía extrema y la pesadilla.

Predominó la pintura al óleo pero también se utilizó la acuarela, el aguafuerte  y se intentó recuperar la pintura al fresco; así mismo, el dibujo encontró auge debido a la facilidad con que expresaba el mundo interior del artista; y gracias a los medios de reproducción que se desarrollaron en la época, tales como la litografía y las prensas metálicas, se popularizaron numerosas imágenes a través de periódicos y revistas.

En esta corriente artística se distinguen tres períodos:
El primero (1770-1820) conocido como Prerromanticismo, se desarrolló en paralelo y como una oposición al Neoclasicismo, predominando el sentimiento sobre la razón, exaltando lo esotérico y misterioso y promoviendo el culto a la Edad Media. Figuras destacadas fueron: William Blake, pintor, poeta y grabador que manejaba temas literarios; Philipp Otto Runge, artista de estilo rígido, intenso, a veces ingenuo, contribuyó con La Esfera de Color, un esquema tridimensional donde organizó todos los colores imaginables de acuerdo a su tono, brillantez, y saturación; Caspar David Friedrich, considerado el representante más genuino del romanticismo alemán, manejó el paisaje transmitiendo una sensación de melancolía y angustia; así como Francisco de Goya, uno de los pintores más potentes y visionarios, consagrado a temas dramáticos que mezclaban lo fantástico y lo real.

El segundo (1820-1850) se considera el apogeo del Romanticismo. En esta época se impuso la representación de temas relativos a la historia moderna y una nueva concepción del paisaje, el cual progresivamente se afectó por la Revolución Industrial. Los artistas más representativos fueron John Constable quien pintó paisajes al natural con un estilo muy libre; Joseph Mallord William Turner que dotó a sus obras de una dimensión onírica; Eugène Delacroix, pintor apasionado con un estilo resuelto y vigoroso; así como Théodore Géricault, quien elevó temas de la vida cotidiana a la categoría de hechos heroicos .

El tercero (1850-1870) o la tradición Post-romántica, fue una época en la que el estilo comenzó a debilitarse, adoptando un cierto “manierismo”. Sobresalieron Arnold Böcklin, cuya obra evocaba el misterio; Eugenio Lucas Velázquez, quien plasmó escenas tanto costumbristas como fantásticas y siniestras; el escritor Victor Hugo, que con obra gráfica al carboncillo y tinta representó un mundo fantástico y angustiado; así como Gustave Doré en el campo del dibujo y la ilustración.

Cuando veas una obra Romántica piensa en esto: ¿Qué te transmite la imagen? ¿Qué elementos de la pieza te dan esa sensación (la figura, los colores, la pincelada)? ¿Notas la relación entre el paisaje y el sentimiento?

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