Las voces de alumnos, dieron vida a la cruda y real poesía de Felipe Montes, en la sala cervantina de Rectoría, en el Tecnológico de Monterrey.
El peligro, la realidad regia oculta, el destino de una sirvienta de trece años, las colonias recónditas y clandestinas, Barrio Antiguo y las calles que circundan la ciudad norteña fueron sólo partes de las obras que Montes compartió con sus lectores. La tarde del domingo 12 de marzo, tuvo a alumnos, invitados y maestros, atendiendo al llamado que cada verso del escritor regiomontano ponía en cada palabra declamada por jóvenes del Tecnológico.
Al margen de comenzar, un grupo de Fara Fara de Difusión Cultural, de dicha institución, abrió entonando reconocidas piezas musicales. El evento fue planeado, dirigido y organizado por los mismos alumnos, quienes quisieron reconocer el arduo trabajo y desempeño que su maestro Montes ha mostrado a través de más de una década en el mundo de la literatura y la docencia.
Las lecturas demostraron el ojo crítico y sensible del escritor hacía su hogar Monterrey, la cara de la moneda que no se muestra a la luz pero se ve a diario entre las sombras de la delincuencia, la violencia, la corrupción y la crueldad, con la que mucha de la población está cobijada.