El panteón de El Carmen y sus piezas de arte
Las panteones son lugares en donde se marca la memoria de una ciudad, donde se vislumbra la línea de tiempo con pautas en cada uno de sus sepulcros y tumbas, y en donde además, se puede leer la historia y la cultura de una sociedad completa.
Así, para el arquitecto y especialista del tema, Juan Manuel Casas García, estos lugares son entes vivos, que contienen la última memoria de un mosaico muy amplio de culturas, hecho que los convierte en verdaderos museos.
“Aquí hay discursos para todos los gustos: historia, arquitectura, poesía, arte o para la simple curiosidad del visitante incidental”, mencionó el autor de “Panteones de El Carmen y Dolores: patrimonio cultural de Nuevo León” y también participante de la restauración del Colegio Civil, hoy Centro Cultural Universitario.
Homenaje a la Memoria: el Panteón El Carmen
Uno ejemplo icónico de la representación del arte funerario, es el Panteón de El Carmen, ubicado en la zona centro e inaugurado el 17 de abril de 1901.
Teniendo su acceso principal en la calle de Bravo, el panteón está rodeado por las calles de Washington, y la prolongación de Aramberri, referente a esto, se ha pensado erróneamente que la calle prolongación de Aramberri dividió en su tiempo al panteón de Dolores y al de El Carmen, sin embargo, esa calle diagonal es la intervención urbana más antigua de toda la zona, pues unía la pequeña ciudad de monterrey con la hacienda de Los Urdiales.
Uno de los principales precursores de El Carmen, fue e doctor Amado Fernández Muguerza, personaje relevante de la vida cultural de Monterrey, quien en 1899, envió cartas al entonces gobernador Bernardo Reyes. Donde escribía:
“…creyendo que ya sea una necesidad imperiosa en Monterrey la existencia de un panteón de primera clase como los que existen en las poblaciones culturas del mundo…”
La obra funeraria, como arquitectura, también da mensajes claros de la posición social y poder económico de sus propietarios. “Es así como se explica la concepción de las más notables obras de arte funerario en el panteón de El Carmen, sin duda, el que mejor logra contener los máximos ejemplares por el periodo en que fue puesto en servicio”, agregó el también catedrático de la Facultad de Arquitectura de UANL.
Así, el Panteón del Carmen, es una hectárea de memoria, historias e invaluables piezas arquitectónicas. Casas García, destaca algunas de éste recinto, ya sea por su importancia arquitectónica o por su aportación cultural.
A. El mausoleo de Manuel Cantú Treviño. Obra ecléctica academicista de tendencia goticista realizada en algún momento entre 1910 y 1920. Es una colaboración entre los maestros Felipe B. Martínez y Augusto Massa, único trabajo registrado que reunió a estos dos artistas funerarios. Está realizado en cantera de Durango o de San Luis Potosí. Construido con cantera, granito y marmol.
B. El mausoleo de Manuel Garza Guerra. Obra ecléctica academicista de tendencia goticista realizada en algún momento entre 1901 y 1915. Es obra de Pedro Pagaya, un artista funerario de la Ciudad de México. Construido en cantera.
C. La capilla del panteón. Es un diseño incluido en el proyecto inaugural del panteón, obra proyectada por el arquitecto anglo-americano Alfred Giles en 1901. Construida en Cantera. Tiene advocación a la virgen de El Carmen y su planta es una pequeña cruz latina de pequeñas proporciones. En su interior se puede disfrutar un espacio de recogimiento y meditación y tiene algunos elementos neogóticos.
D. La portada del panteón. Es un diseño incluido en el proyecto inaugural del panteón, obra proyectada por el arquitecto anglo-americano Alfred Giles en 1901. Construida en cantera y construida por el arq. Pedro Cabral. La visión de la portada de la portada produce identificación de sagrado y lejos del estilo medieval gótico es un acceso estratificado en volumenes decrecientes, altivo, místico y espiritual.
E. El mausoleo de la familia de Francisco y Octaviano Zambrano. Fotos de época de lo antes mencionado sólo tengo de la portada del panteón (que son fáciles de conseguir) y del mausoleo de Francisco y Octaviano Zambrano. La más grande e impresionante obra de arquitectura funeraria en el panteón de El Carmen, realizada enteramente en mármol blanco de Carrara por el maestro italiano Miguel Giacomino. Data del periodo 1910-1920, y su lenguaje es academicista ecléctico. Construido en su gran mayoría en mármol.
Así, éstos son sólo algunos ejemplos de la grandes obrar artísticas que pueblan éstos lugares de última morada.
Bloque con datos extras:
- En 1899 se presenta el proyecto del panteón al entonces gobernador de N.L. Bernardo Reyes.
- Abre sus puertas el 17 de abril de 1901.
- 90% de su mármol fue importado de Italia.
- Otros de los materiales más comunes que se utilizaban para la obra funeraria eran: la cantera de San Luis o de Durango, y el mármol negro del Topo Chico.
- Cuenta con un área de una hectárea.
- Aún cuenta con espacios en venta.
- El 11 de abril de 1899, el doctor amado Fernández Muguerza, constituyó la sociedad anónima del panteón entre los que destacan: Viviano L. Villarral, presidente; Amado Fernández, secretario; Francisco Belén, tesorero; entre otros.
- En 1920 abre sus puertas el Panteón de Dolores, influenciado por la obra de Giles. Y que es considerado el hermano cementerio de El Carmen.
- El maestro constructor Anastacio Puga diseñó la entrada del Panteón de Dolores.
- Entre las personas sepultadas en estos panteones están:
Pablo Livas, Miguel F. Martínez, Serafín Peña, Joel Rocha y Benjamín Salinas (fundadores de Salinas y Rocha), Eduardo Aguirre Pequeño, Isaac Garza, José A. Muguerza y Fransisco G. Sada (fundadores de Cervecería Cuauhtémoc), Ignacio A. Santos (fundador de GAMESA), Pablo A. de la Garza entre muchos otros.
- En 1910, el periódico Monterrey News, publicó un reportaje titulado “La mansión de los muertos”, y hace relevancia de su ostentosidad y coloca a la ciudad como una sociedad progresista.
