El Fondo de Cultura Económica tiene en preparación la poesía reunida de David Huerta. Aparecerá este año con el título de La mancha en el espejo. Reúne todos los libros publicados por este autor desde 1972. Los poemas que damos a conocer forman parte de obras nuevas. El pasado 3 de marzo, en el marco de la Feria Internacional del Libro del Palacio de Minería, poetas de las jóvenes generaciones leyeron en el Salón Manuel Tolsá una selección de textos huertianos.
EL GUSANO DE LA CONCIENCIA
No busques debajo de las puertas
ni detrás del refrigerador. La conciencia
y su gusano enorme, fosforescente, enantiomorfo
de las Enseñanzas de Don Juan,
no estará ahí donde lo trates de encontrar
—sino, siempre, en otro lado:
el gesto de esa muchacha a la que viste fugazmente
como si en verdad fuera fea;
la frase de ese hombre donde brilló
con una luz opaca y tambaleante
una palabra muy poco luminosa
como “cansancio”, “desempleo”, “enfermedad”;
la noticia de ese joven estudiante en la cual,
sin el menor énfasis ni una micra de melodrama,
te habló de “hambre”.
Está en los ángulos de cada decisión
y en el espeso caldo de tus opiniones
y de tus juicios intempestivos.
A veces asoma en la coloratura de tus preguntas
y en el falsete de tus dudas.
El gusano se ha deslizado entre las páginas
de los libros. Ha entrado
en el sueño vespertino y en las horas sagradas
del insomnio. Déjalo estar, déjalo reptar.
Su noche es como el día de tu nacimiento.
Nace uno con él o nace sin él.
La mayoría nace sin él, como una imperfecta
botella de mezcal.
Tú naciste con él. Acepta
las consecuencias de tu condición
y no llores cuando sientas
sobre la planicie de la cara
cómo el gusano se desplaza
a semejanza de la luz quemante
de un sol de mediodía o un sol de medianoche.
Fuente: Revista de la Universidad de México / México / Distrito Federal